En esta semana haciendo las lecturas que nos propone la Iglesia para cada día, me encontré con un mensaje fuerte, muy fuerte y directo de San Pablo y con tintes bastante proféticos donde nos expone lo siguiente:
Hechos 20,28-38En aquellos días, decía Pablo a los presbíteros de la Iglesia de Éfeso: Tened cuidado de vosotros y del rebaño que el Espíritu Santo os ha encargado guardar, como pastores de la Iglesia de Dios, que él adquirió con su propia sangre.Ya sé que, cuando os deje, se meterán entre vosotros lobos feroces, que no tendrán piedad del rebaño. Incluso algunos de vosotros deformarán la doctrina y arrastrarán a los discípulos. Por eso, estad alerta: acordaos que durante tres años, de día y de noche, no he cesado de aconsejar con lágrimas en los ojos a cada uno en particular. Ahora os dejo en manos de Dios y de su palabra de gracia, que tiene poder para construiros y daros parte en la herencia de los santos.
La lectura de verdad nos hace reflexionar, muchos podemos hablar de aquellos pastores que con sus propias ideas tratan desde dentro del seno de la Iglesia de contradecir la doctrina que Cristo y los Apóstoles nos dejaron como depósito de Fe. Aunque también es cierto que gracias a Dios son más aquellos Sacerdotes ocupados en mantenerse fieles a su tarea evangelizadora sin alteraciones de ningún tipo.
Pero, también es cierto que como laicos podemos ser de aquellos que Pablo habló, de los que destrozan la doctrina... Y es que amigas y amigos debemos de examinarnos siempre con tal de no caer en este error tan grave cuando asumimos responsabilidades en algun grupo pastoral.
Debemos siempre percatarnos que cuando asumimos responsabilidades pastorales de algun tipo, nuestro testimonio debe ser coherente en todo sentido, en la vida personal y con la doctrina que se nos a dado, no podemos anteponer creencias personales al Depośito de la Fe, no podemos generar confusiones en nuestras hermanas y hermanos, diciendo creo en Cristo, soy católico estoy en la Iglesia pero .............
Algunas personas podrán decir...FUNDAMENTALISTA.... yo diría Fundamentalista en lo fundamental, en la fidelidad y en celo por la doctrina. No se trata de creer a ciegas sino de estudiar, formarse y luego amar lo que se conoce.
Somos entonces coherentes?, promovemos integramente nuestra FE? o más bien promovemos y predicamos nuestro propio y acomodado credo?
Para pensar verdad?
Espero que durante esta hermosa fiesta de Pentecostés el el Espíritu Santo derrame sus dondes sobre nosotros, nos ayude a entender la Verdad, y encienda en nosotros el Fuego de su amor...!
