miércoles, 6 de octubre de 2010

El hotelero

Hola mis queridos amigos en Cristo el Señor..!!

Muchas veces meditamos en torno a quien es mi prójimo al igual que el hombre del Evangelio, (http://www.aciprensa.com/calendario/calendario.php?dia=4&mes=10&ano=2010) que recibe como respuesta de Jesús la Parábola del Buen Samaritano.

Leyendo este pasaje tan conocido, me sorprendí de que la respuesta de Jesús es bastante comprometedora, no se trata de quien sea tu prójimo, se trata de que tu lo seas para los demás. De asumir los dolores de tus hermanos, hacerlos tuyos y hacer siempre un esfuerzo adicional por ellos. Cómo hacerlo? Bueno, pues estando pendientes de las sitauciones que atreviesan tus amigos, estar atentos a las necesidades de nuestra familia y de los más próximos, solo así podemos permanecer sensibles a las dificultades de una sociedad que sufre. Además podemos aprovechar todos lo canales de ayuda que nos ofrece la Iglesia para ayudar a los más necesitados.

Pero por otro lado y escuchando una bella reflexión sobre esta parábola, me dí cuenta de un personaje que muchas veces pasa desapercibido....¿sabés cuál? Si... el hotelero. Esta persona que recibe en su tienda a la persona lastimada y mal herida, que recibe un pago por su trabajo y por lo demás que pueda gastar.

Ese personaje puedes ser tu, este que está al servicio de la Iglesia, recibiendo de Dios la paga por su servicio para que al mismo tiempo te pide que recibas en tu corazón a aquellas personas que El en su infinito amor y misericordia ya curó, ya perdonó, ya sanó; solo quiere que tu completes el trabajo, y te dará los dones y los talentos que necesites para ello.

Es necesario que abramos nuestro corazón para recibir a estas personas que durante la vida han sido asaltadas, robándoles su dignidad, su amor propio, su estima, sus afectos, su confianza, para ellas debemos ser su prójimo y debemos mostrarles que en la vida de Iglesia les vamos a recibir para terminar de curarse y volver al camino de la vida con fuerza renovada. Así como probablemente sucedió contigo o conmigo en algún momento.

Pidasmole al Señor todo misericordioso nos de un corazón acogedor para recibir con afecto a nuestro prójimo.

Que estés muy bien un abrazo...!! Saludos...Osva...

2 comentarios:

  1. Wow! Es cierto Osva!... Ahora que lo pones de esa forma, pienso que a todos nos corresponde ser el hotelero. También pienso en otro pasaje Bíblico, que es cuando José y María andaban buscando posada... Muchas puertas fueron cerradas, pero hubo una persona que buscó ayudarlos como mejor pudo y fue esa persona al final el posadero que ofreció su último espacio para el nacimiento del Mesías, Jesucristo el Señor. Si nosotros no abrimos el corazón como dices, no estaríamos cumpliendo fielmente con la ayuda a nuestro prójimo, tal como Jesús lo manda, a través de nuestras acciones. No dejes de tomar tiempo para estas reflexiones tan bellas!!!

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  2. Gracias Adri, ¡cuánta razón tienes..!! el posadero de la Natividad y el de la parábola... Me pone a soñar y pensar que Jesús siempre tuvo en consideración a este que le abrió la puerta a su Madre y a su padre San José... y le recordaba con tanto cariño... que hasta lo usó en uno de sus ejemplos...!! Abríd las puertas y que tu corazón sea lugar de descanso y consuelo..!!!

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Con y Por Amor