viernes, 6 de mayo de 2011

Por extraño que parezca... es voluntad de Dios...!

Hola amigas y amigos en Cristo el Señor..!! Aun estamos de fiesta por la resurrección de Jesús... No les parece genial 50 días de fiesta..!?

Y como parte de esta fiesta está el disfrutar de un dulce riquísimo... el de la Palabra de Dios...Siguiendo la línea de lectura que nos ofrecía la Liturgía de la Vigilia Pascual, meditemos esta vez en la sacrificio de Isaac, cuando Dios pone a prueba a Abraham pidiendo el sacrificio de su hijo amado, en lo que es una prefiguración del sacrificio de Jesucristo, en Gn 22, 1-19.

Comienza el texto diciendo que Dios llama a Abraham por su nombre y este le responde.. Aquí estoy... Sin duda amigos y amigas esto me deja con mucho que pensar y reflexionar, solo empezando la lectura; la respuesta de Abraham refleja total disposición sin si quiera saber lo que le Dios le iba a pedir.

Dios nos llama todos los días por nuestro nombre, pero a veces nuestra respuesta es ambigua... puede ser un Sí? dudoso... o un qué deseas? igual de dudoso... ¿Cómo es nuestra respuesta?

Luego Dios le hace una petición que a nuestros oídos puede sonar muy absurda.. Ofreceme el hijo que tanto te costó tener, al que amas al que yo te di, en Sacrificio. Aquí vemos la segunda respuesta y el segundo aprendizaje que nos deja Abraham, no renegó, no se enojó, no se molestó, no desobedeció, ni preguntó nada; solo actúo como se lo dijo el Señor, tomó todo y salió al monte que Dios le diría.

Ante una prueba incomprensible de la vida, ante lo que llamas injusticia, ante las propuestas duras de Dios, te enojas con El, le reniegas, dejas de rezar, ya no vas a misa, te echas en el cuarto a llorar, maldices o desobedeces y sigues tus propios criterios o te pones actuar según la propuesta del Señor?

La tercer enseñanza de Abraham es su confianza en la providencia, nos deja una oración muy pequeña para tiempos difíciles... "Dios proverá".. Ten Fe que nunca nada te hará falta, Dios tiene contado cada cabello de tu cabeza hasta los que se te cayeron en el baño... Ten confianza.

Por último, ¿por qué debes confiar en lo que te pide Dios y vivir la prueba que se te ha presentado en tu vida? Porque nunca permitirá que nada malo te pase porque lo amas y el te amó primero. Por eso le dijo a Abraham: alto baja el cuchillo ahora sé que temes a Dios, es decir le amas y le respetas y por esta misma razón Dios le llenó de bendiciones y bellas promesas.

Si le amas, si le obedeces y aceptas su voluntad por más extraña que a veces nos parece, tu vida se colmará de infinitas bendciones para ti y los tuyos...!! AMEN

Les quiere Osva..!

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