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Hablemos Claro
• Evangelio: Juan 6,60-69
En aquel tiempo, muchos discípulos de Jesús, al oírlo, dijeron: "Este modo de hablar es duro, ¿quién puede hacerle caso?" Adivinando Jesús que sus discípulos lo criticaban, les dijo: "¿Esto os hace vacilar?, ¿y si vierais al Hijo del hombre subir a donde estaba antes? El Espíritu es quien da vida; la carne no sirve de nada. Las palabras que os he dicho son espíritu y vida. Y con todo, algunos de vosotros no creen." Pues Jesús sabía desde el principio quiénes no creían y quién lo iba a entregar. Y dijo: "Por eso os he dicho que nadie puede venir a mí, si el Padre no se lo concede." Desde entonces, muchos discípulos suyos se echaron atrás y no volvieron a ir con él. Entonces Jesús les dijo a los Doce: "¿También vosotros queréis marcharos?" Simón Pedro le contestó: "Señor, ¿a quién vamos a acudir? Tú tienes palabras de vida eterna; nosotros creemos y sabemos que tú eres el Santo consagrado por Dios."
Amigos mios y muy queridos en Cristo Jesús...
Hoy en día vivimos atormentados por la sociedad del relativismo, a la que el modo de hablar de
Jesús se le hace muy duro, por lo que ha tratado de meter en nuestros corazones un cristianismo
liviano, uno muy light, bajo en responsabilidades, cero compromiso y que puedes construir a la
manera que mejor te acomode.
Hoy al igual que en tiempos del Maestro, a quienes se toman el papel de ser un cristiano muy serio se le llama fanático, y se le persigue por su modo veraz de decir las cosas.
Cuántas veces decimos que somos católicos y rezamos en la misa, durante la profesión de Fe, que
creemos en la Iglesia que es Una, Santa, Católica y Apostólica, pero cuando las palabras de la Santa Madre Iglesia me parecen muy duras entonces traiciono la doctrina que digo seguir, para construir y redactar mi propio credo: Creo en la Iglesia siempre y cuando me deje actuar como me parezca conveniente...
Que tristeza amigos, que pena, pero es la realidad de muchos hoy en día, de personas que asisten a nuestros grupos juveniles durante años y no cambian de mentalidad, solo por que el modo de hablar de Cristo les parece muy duro. Muchos están hoy de-formando jóvenes en nuestras parroquias. Pero quienes resistimos a esto no podemos ser cómplices, al contrario, debemos proclamar con mayor firmeza las certezas de nuestra Doctrina. Respetando opiniones y posturas, pero hablando claro de las convicciones que nos llevan a amar a Cristo y su Iglesia.
La religión amigos mios es la unión que yo tengo con Dios, y para mantener este ligue (re-ligare) con El, necesito que alguien me ayude, me guíe, y por ello la Iglesia, fundada por Jesucristo sobre Pedro (piedra), y los apóstoles, guiada por la inspiración del Espíritu Santo, y quien conserva el depósito de la Fe donde está Toda la Verdad de la Revelación (La palabra escrita, la Biblia, y la trasmitida, la Tradición Apostólica), me propone una doctrina a seguir, en términos de fe, espiritualidad y moral.
Si esto no me apetece por ser muy duro, recordemos la respuesta de Jesús en este Evangelio,
¿también vosotros quereis marcharos?
Recordemos entonces amigos, que solo El tiene palabras de vida eterna. O le seguimos y le
escuchamos o no.... Recuerden que esto no admite medias tintas, como todo lo que el mundo de hoy propone.
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Nos vemos, con cariño y dientes apretados... Osva!!! Espero como siempre sus comentarios